Los gusanos de alambre, alfilerillos o doradillos, son larvas de escarabajos de varias especies de la familia Elateridae, siendo Agriotes spp. las más descritas. Son polífagas, afectando a girasol, cereales, leguminosas, patata, hortícolas, atacando de forma subterránea a semillas germinadas, plántulas, raíces y base de los tallos.

El desarrollo de las larvas puede durar de 3 a 5 años y son las causantes de los daños. Inicialmente son de color blanquecino, evolucionan a marrón o amarillo-anaranjado, con la cabeza más oscura. Delgadas, cilíndricas, duras, segmentadas y con tres pares de patas torácicas, miden entre 3 y 25 mm de longitud según fase larvaria. Se mueven en el perfil del suelo (hasta 60 cm de profundidad) en función de la humedad y la temperatura (son sensibles a la sequía y a las temperaturas extremas). Una vez alcanzado su desarrollo máximo, pasan a estado de pupa enterradas a unos 30 cm.

Los mayores riesgos se asocian a ataques durante los primeros estados del girasol (semillas en germinación y raíces y tallos de las plántulas).